Manifestamos solidaridad activa con los compañeros
y compañeras de Chiloé. La catástrofe social y ambiental que se vive es
responsabilidad directa de las empresas salmoneras en complicidad con el
Gobierno (a través de sus funcionarios en SERNAPESCA), quienes se ponen de
acuerdo, de espaldas a la comunidad, para arrojar más de 9 mil toneladas de
desechos descompuestos al mar, con graves consecuencias contaminantes, sumiendo
a las y los chilotes en estado de crisis. Por lo que nos sumamos a las voces
científicas y ciudadanas que denuncian la sobreproducción indiscriminada de
salmones, el colapso por saturación de nutrientes en el mar y su impacto en el
florecimiento agresivo de la Marea Roja, magnificando el deterioro del evento
natural por intervención humana, transformándolo en tragedia. Ello causa un
daño irreversible en el ecosistema y altera las vidas de las comunidades
cercanas, con severas consecuencias naturales, económicas y psicosociales para
los habitantes de Chiloé.
Encontramos desproporcionado que sean las
comunidades quienes deban pagar las consecuencias del “matrimonio” infame entre
clase política y empresariado, los que utilizan sus medios de comunicación para
confundir a la ciudadanía y ocultar sus groseros errores, ofreciendo migajas en
forma de bonos para cooptar la voluntad de quienes reclaman por dignidad,
debido al daño producido. A su vez, repudiamos la represión policial contra los
pescadores y la comunidad chilota, quienes defienden sus territorios y persiguen
el bien común. Estaremos vigilantes frente a situaciones de abuso y/o violencia
desmedida para amplificar el grito de los sencillos y defendernos mutuamente.
Frente al saqueo ambiental y la colusión de la
clase política con el mundo empresarial, seguimos sosteniendo que “el conflicto
de uno, será el conflicto de todos y todas”. Invitamos a seguir sumando
esfuerzos con solidaridad y apoyo mutuo frente a las amenazas a la vida. La
codicia y ambición desmedida de los grupos de poder sólo podrá ser detenida con
la participación de quienes día a día sentimos el impacto de sus decisiones
mezquinas. Unidos podemos hacerles frente y emparejar fuerzas. Hoy más que
nunca: Tod@s somos Chiloé.
Red Ambiental Norte / Serena-Coquimbo, mayo 2016